Dungeonmans

Dungeonmans es un roguelike en el que los jugadores podrán crear a su propio héroe —guerrero, mago, ladrón, clérigo, etcétera— y explorar un mundo enorme lleno de ciudades, mazmorras, otros personajes con los que interaccionar, y sobre todo, muchos enemigos a los que combatir.

Los jugadores podrán construir su propio bastión dentro del mundo de Dungeonmans, convirtiéndolo en una base de operaciones desde la que gestionar a otros personajes. Ahora bien, lo principal será salir a explorar el mundo que nos rodea, que está lleno de mazmorras, tesoros y peligros.

Como en cualquier juego 'sandbox', en Dungeonmans podremos ir a donde queramos y entrar donde queramos. Esto quiere decir que si bien podremos ir poco a poco, adentrándonos en mazmorras con enemigos y tesoros ajustados a nuestro nivel, también es posible meterse en un lugar en el que no deberíamos entrar.

Dungeonmans tiene una ventaja bastante importante con respecto a otros títulos del género: tiene un apartado visual espectacular. Al igual que muchos otros roguelike, no tiene animaciones, pero sí un 'tileset' precioso.

Dungeonmans es un roguelike excelente, que no solo cuenta con un apartado visual y una mecánica de juego muy pulidos, sino que también tiene un mundo colosal. En total, contando con que sobrevivamos lo suficiente para contarlo, hay decenas de horas de contenido.